
En cualquier conversación que tengamos sobre comida, siempre van a estar presentes los sentidos ¡como es lógico! Pero siempre nos centramos en los mismos: gusto, vista y olfato, incluso en el orden que he indicado. Si bien es cierto que estos sentidos son muy importantes, no debemos olvidarnos de la importancia que tiene el oído en lo que comemos.
Centrándonos en gastronomía, tenemos dos tipos de sonidos que intervienen en nuestra percepción al degustar la gran mayoría de los alimentos:
- El sonido en boca.
- El sonido ambiente.
Cuando hablamos del primero de ellos, nos referimos al sonido que produce un alimento al meterlo en la boca, lo crujiente que lo encontrarás. Imagina que te ponen un bol de chips de patatas y al morderlo no está crujiente, esa patata aunque tenga buen sabor, la percepción para ti nunca va a ser la misma. En este grupo de sonidos también se incluyen otros como la presión al descorchar una botella de cava, si no hace el ruido que esperamos… “la cosa no pinta bien” ¿verdad?.
El otro tipo de sonido que interviene en la percepción y degustación de los alimentos es el sonido ambiente. La música que está sonando mientras comemos. En un estudio realizado por el profesor de psicología experimental y director de Crossmodal Lab, Charles Spence, ofreció a varios voluntarios un postre mientras escuchaban distintos sonidos. Durante los sonidos más agudos el postre resultaba más dulce, mientras que el mismo postre se percibía mas amargo al escuchar los sonidos más graves.
Seguro que en varias ocasiones has oído hablar de la escasa calidad de la comida de los aviones, está claro que no seré yo quien diga que es igual a la se puede degustar en un restaurante con Estrella Michelín, pero es cierto que el que no la sintamos tan sabrosa como se merece, en gran parte es debido al ruido que producen los motores, reduciendo la capacidad de percibir el sabor. El ruido no influye igual en todos los sabores, el umami, presente en alimentos como el tomate, parmesano o anchoas se intensifica ante situaciones con ruido, esto conlleva a que un 27% de las bebidas a base de zumo de tomate se consuman en los aviones.
Si este sentido tiene cierta importancia en la gastronomía ¿Cómo disfrutan y degustan los alimentos las personas que tiene problemas de audición (parciales o totales? Pues bien, como todos sabemos el ser humano cuando es privado de un sentido agudiza el resto. Las personas sordas no detectan el crujir de una tableta de turrón crocante, por ejemplo, pero se centran en la fuerza que realizan al morderlo, el tacto que tiene en boca ese alimento… nos cuenta Nuria García -audióloga protésica e intérprete de lengua de signos- que lleva casi 10 años trabajando con personas sordas.
Cuando le preguntamos cómo le explicaría ella a una persona con falta de audición el sonido que provoca un alimento, entre risas nos respondió que para eso es “muy socorrida” la lengua de signos. Tanto la expresión corporal como los propios signos son capaces de expresar todo lo que se siente a la hora de degustar un alimento nos aclaró Nuria.
Después de todo lo que te he contado y observar cómo influye el sonido en los sabores ¿realmente crees que el sentido del oído no es importante a la hora de degustar y disfrutar una buena comida?
Muchas gracias Difevents! Un placer compartir un rato con vosotros en el que todos aprendemos y disfrutamos!
Gracias a ti Nuria!
Esperamos que nos sigas contando tantas cosas interesantes a cerca del sentido del oído!